Las claraboyas del techo dieron poco trabajo. El asunto fue dejar todo sin óxido para su colocación. ¿Te cuento cómo?
Reparando el techo del motorhome y colocando las claraboyas
El techo del motorhome nos está dando bastante trabajo pero ¡va a quedar de primera!
Cuando me hablen de amor, ésta será mi imagen favorita.
¿Qué dificultades tuvimos que resolver?
Pensamos que con las paredes ya habíamos tenido una buena batalla pero el techo subió al puesto uno del ranking.
En resumen: Limpiamos y dejamos toda la superficie del techo lo mejor que pudimos. El cole tiene el techo curvo y las claraboyas son planas. Decidimos entonces hacer una estructura que sobresale del techo para que las claraboyas apoyen en una superficie recta.
Pensamos que darle un mejor apoyo resolvería cualquier problema que pudieran tener los encuentros y el sellado entre el techo y las claraboyas.
Nadie quiere agua en el interior, el estar aún rodeados de óxido nos hace reflexionar sobre el poder del agua.
En estas imágenes tenemos los moldes que hicimos para construir el apoyo de la claraboya. El momento en que estábamos soldando la estructura a la chapa del techo y el resultado final con todo ya pintado para que no se nos oxide.
Como no queríamos desmantelarlo todo (entre nosotros aún no entiendo por qué) dejamos en el centro del cole una parte del techo original (como de un metro de ancho). Rasqueteamos, despegamos mucha membrana, retiramos toda la pintura de fábrica y nos quedamos casi a chapa pelada y dedos cansados.
Tuvimos ayuda extra (los hijos se pusieron la 10) y el trabajo nos llevó como dos semanas. Increíble lo adherida que estaba esa membrana.
Como anécdota lijar a chapa pelada teniendo el cole al exterior y un par de días de lluvia no fueron una buena estrategia y tuvimos que lijar un par de veces extra para retirar el propio óxido que provocamos (sin comentarios).
¿Cómo empezamos a trabajar el techo?
Bajo cada pedazo de membrana bajo cada capa de pintura y detrás de cada remache, sólo encontramos agujeros y óxido. Cambiar las chapas de las paredes y una buena parte del techo fue una decisión importante, de tiempo y de dinero. Estamos muy conformes con haberlo hecho así.
Aprovechando que las chapas del lateral derecho aún no están colocadas, pudimos trabajar mas cómodos en la limpieza del techo, que hicimos primero con espátulas, removedor, nafta y finalmente con la lijadora eléctrica.
Acá estamos todos estamos luchando contra la membrana asfáltica.
Para colocar las claraboyas, lo que hicimos fue soldar una estructura nueva hecha con perfiles con la forma de la claraboya (eso incluyó la fabricación de bordes redondeados) que sobresalen del techo y y nos aseguramos así de resolver la curvatura del techo original contra el marco plano de la claraboya.
Cortando la chapa del techo para colocar después la estructura donde apoyará la claraboya.
Soldando todos los encuentro para asegurarnos no tener filtraciones.
(En realidad, como se ve en las fotos, el que soldó y abrió el techo fue Franco, pero me gusta hablar en plural).
¿Dónde pusimos las claraboyas?
Nuestro cole tenía tres agujeros redondos que seguramente en sus tiempos de gloria fueron para los extractores de aire. Cuando lo compramos estaban cubiertos con membrana por afuera y tapados con el cielorraso por dentro, así los descubrimos después de desmontar.
Decidimos aprovechar la posición de las ventilaciones y colocar ahí las dos claraboyas.
El agujero que nos cae sobre el dormitorio lo cerramos, ya que hemos leído en varios grupos de rodanteros que en los lugares muy cerrados se produce condensación, y no queremos que llueva sobre la cama.
La primera claraboya nos quedó ubicada sobre el pasillo que tendremos entre las camas cuchetas y el baño y que comunica también con nuestro dormitorio (en el próximo artículo subo el plano de distribución) eso dará luz y ventilación justo donde lo necesitamos.
La segunda nos quedó en el área del comedor, también va a estar genial tener aire e iluminación cenital en este lugar.
Para trabajar usamos moldes hechos con papel que luego trasladamos a las chapas, pusimos perfiles estructurales 20×30 para armar el marco de la claraboya y soldamos con costura todo alrededor para asegurarnos que no entre ni una gotita de agua.
¿Qué claraboyas elegimos?
Las claraboyas las compramos por Internet a Yazmin Contreras como muchas otras cosas que fuimos necesitando para camperizar el cole. Arrancamos medio tímidos comprando un par de ventanas y podría decirse que se ha convertido en una de nuestras proveedoras fundamentales, porque nos ha entregado a un muy buen precio elementos de calidad. Estar tan lejos de todo se vuelve un obstáculo a la hora de comprar, así habernos encontrado con Yazmin agilizó mucho el asunto.
Nuestras claraboyas son de 35 x 50 con vidrio templado al exterior y sirven como salida de emergencia en caso de tener que salir por el techo.
Soldar y molar parece que nao tem fim.
Esperemos que valga cada rollo de flux invertido en este ambicioso proyecto que una parte me encanta poder contar y compartir cada pasito que vamos avanzando y por la otra, la ansiedad me hace mirar también todo lo que nos falta.
En estas imágenes se ve el detalle del ángulo que preparamos redondeado para que apoye bien la claraboya, la presentación para asegurarnos que quedara bien y cómo se vé todo desde adentro. Emoción total.
¿Qué mas decirles?
Colocamos así las ventanas hacia el universo para que entre el cielo a nuestro motorhome. Porque no quiero que entre el agua, pero si quiero, como dice la canción, una lluvia de estrellas alrededor de mi.
Quiero además detenderme un momento a agradecer y contemplar todo lo que hemos avanzado.
Porque aunque no lo parezca nuestra casita sobre ruedas va tomando forma y somos nosotros los que se la estamos dando con paciencia, amor, dolor de espalda, caras sucias y pelos parados.
Gracias por seguir leyendo hasta aquí abajo, los invito a quedarse con nosotros y seguir paso a paso nuestro proyecto En Motorhome.
Un abrazo desde el techo.
Carla
